No sé cuántos tratamientos, o formas para dejar de fumar has probado antes de llegar a la solución de la hipnosis.

No te sientas culpable porque en realidad eres una víctima de cómo la mente genera hábitos de comportamiento y de la sensación física, que generan los químicos que le ponen a los cigarros

Pero la mayoría de las personas que deciden que, es el momento de dejar de fumar, se dan cuenta que, las pastillas, los chicles y los parches de nicotina no les ayuda lo suficiente.

Y eso es porque más allá de el proceso químico de la nicotina, que intenta ser sustituido y abandonado poco a poco con estos productos, existe una razón emocional y psicológica por la que todavía sigues fumando.

Tal vez hay una parte de ti a la que le gusta fumar, pero hay otra parte de ti que quiere dejar de fumar y no sabe cómo.

Casi todos los fumadores empezaron siendo jóvenes, por sentirse mayores, importante, aceptados en un grupo o simplemente por diversión.

Pero cuando eres un adulto y estas empezando a sentir los efectos negativos del tabaco en tu salud, en tu vida, en tus relaciones y quieres dejar de fumar, tal vez te estás dando cuenta que dejarlo sólo por tu propia fuerza de voluntad es difícil y buscas ayuda.

Con tu mente consciente, la parte de tu mente  con la que razonas, probablemente piensas, cómo puede ser que un cigarro me controle y me condicione tanto mi vida diaria.

Eso es porque la mente consciente está diseñada para pensar, pero la mente inconsciente es la que se encarga de tus hábitos de comportamiento.

Y los hábitos de comportamiento, como fumar, son programas mentales automáticos, codificados de manera emocional y psicológica, a los que no tienes acceso con tu mente racional.

Por eso si te dices «yo lo dejo cuando quiera», te estás engañando a ti mismo, sin darte cuenta.